martes, 24 de mayo de 2011

LOS SUELOS

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
MINISTERIO DEL PODER PARA LA EDUCACION
U.E.INSTITUTO CENTRO FUTURO







Importancia
 De los Suelos




























INTRODUCCION
     La cuantificación de las pérdidas de suelo en Venezuela ha representado un problema de difícil solución debido a la escasa información de suelos existente en áreas inaccesibles. La erosión del suelo constituye el principal proceso de degradación de las tierras. Este proceso ha sido estudiado ampliamente, más no su efecto sobre la productividad. El presente trabajo tiene como finalidad investigar la erosión de los suelos y su importancia en la administración de empresas agropecuarias, la identificación de las áreas con riesgos potenciales de erosión y la cuantificación de las pérdidas actuales y potenciales de suelo, constituyen aspectos importantes en la planificación y manejo de quienes se involucran en la explotación de las tierras con fines económicos, más aún cuando se trata de tierras en zonas altas, donde la ocurrencia de procesos erosivos se ve acelerada por la intervención del hombre, así como, por encontrarse en ellas las nacientes de los ríos y las obras de represamiento de agua que son afectadas por el acarreo de sedimentos.
Varios modelos y técnicas de medición directa han sido desarrollados en las últimas décadas para estimar la masa de sedimentos separada por el impacto de la gota de lluvia (pérdida de suelo por salpique), sin embargo, en esta investigación enlazamos en pequeño esbozo del suelo, para determinar así la importancia de la erosión en la administración y el resto de su contenido expresado en: Definición de erosión, Tipos de erosión, Causas, Impactos, Magnitud, Medidas, entre otros puntos de interés.
Muchos de los suelos con vocación agrícola y ganadera en Venezuela, sufren problemas de erosión que limitan seriamente su capacidad productiva. Las regiones Andina y el Sur del Lago de Maracaibo presentan los mayores porcentajes de erosión hídrica. La eólica también es común en la región del Caribe, sobre todo en la península de la Guajira. Los distintos grados de erosión que se presentan en el país, debido a los factores geológicos y principalmente antrópicos, son una realidad preocupante que nos lleva a reflexionar sobre el uso y conservación de nuestros recursos naturales como el suelo.





Suelos
     Se denomina Suelo a la parte superficial de la corteza terrestre, biológicamente activa, que tiende a desarrollarse en la superficie de las rocas emergidas por la influencia de la intemperie y de los seres vivos (meteorización). El suelo es el sistema complejo que se forma en la capa más superficial de la Tierra, en el límite entre diversos sistemas que se reúnen en la superficie terrestre: la litosfera, que aporta la matriz mineral del suelo, la atmósfera, la hidrosfera y la biosfera que alteran dicha matriz, para dar lugar al suelo propiamente dicho.
Inicialmente, se da la alteración física y química de las rocas, realizada, fundamentalmente, por la acción geológica del agua y otros agentes geológicos externos, y posteriormente por la influencia de los seres vivos, que es fundamental en este proceso de formación. Se desarrolla así una estructura en niveles superpuestos, conocida como el perfil de un suelo, y una composición química y biológica definida. Las características locales de los sistemas implicados — litología y relieve, clima y biota — y sus interacciones dan lugar a los diferentes tipos de suelo.
Los procesos de alteración mecánica y meteorización química de las rocas, determinan la formación de un manto de alteración o eluvión que, cuando por la acción de los mecanismos de transporte de laderas, es desplazado de su posición de origen, se denomina coluvión.

De un modo simplificado puede decirse que las etapas implicadas en su formación son las siguientes:



Importancia de los suelos
     Los suelos permiten que las formaciones vegetales naturales y los cultivos se fijen con sus raíces y así busquen los nutrientes y la humedad que requieren para vivir.
El hombre obtiene del suelo no sólo la mayor parte de los alimentos, sino también fibras, maderas y otras materias primas.
También los suelos son de importancia vital para los animales, muchos de éstos  obtienen su alimento única y exclusivamente de los suelos.
Además; sirven, por la abundancia de vegetación, para suavizar el clima y favorecer la existencia de corrientes de agua.
Peligros que afectan los suelos
La erosión es uno de los principales problemas que alteran la utilidad de los suelos. Cuando éstos quedan desnudos de su cubierta vegetal protectora, son destruidos rápidamente por la acción del agua, el calor y el viento. Su capa útil fértil, es lavada. La pérdida de la fertilidad o empobrecimiento de los suelos, casi siempre es producido por el abuso del cultivo o pastoreo en ellos. Recuerda que los suelos necesitan también del abono y del control de cultivos, además de la rotación de estos, para mantenerse  en condiciones apropiadas para seguir produciendo
Ya sabemos que el suelo es la parte superficial de la corteza terrestre conformada por minerales y partículas orgánicas producidas por la acción combinada del viento, el agua y procesos de desintegración orgánica. Ahora conoceremos su importancia, peligros que lo afectan, contaminación y conservación.

Los suelos permiten que las formaciones vegetales naturales y los cultivos se fijen con sus raíces y así busquen los nutrientes y la humedad que requieren para vivir. El hombre obtiene del suelo no sólo la mayor parte de los
alimentos, sino también fibras, maderas y otras materias primas. También los suelos son de importancia vital para los animales, muchos de éstos obtienen su alimento única y exclusivamente de los suelos. Además; sirven, por la abundancia de vegetación, para suavizar el clima y favorecer la existencia de corrientes de agua.
 Peligros que afectan los suelos
La erosión es uno de los principales problemas que alteran la utilidad de los suelos. Cuando éstos quedan desnudos de su cubierta vegetal protectora, son destruidos rápidamente por la acción del agua, el calor y el viento. Su capa útil fértil, es lavada.
La pérdida de la fertilidad o empobrecimiento de los suelos, casi siempre es producido por el abuso del cultivo o pastoreo en ellos. Recuerda que los suelos necesitan también del abono y del control de cultivos, además de la rotación de estos, para mantenerse  en condiciones apropiadas para seguir produciendo.
El agua es un erosivo muy enérgico. Cuando el suelo ha quedado desprotegido de la vegetación y sometido a las lluvias, los torrentes arrastran las partículas del suelo hacia arroyos y ríos. El suelo, desprovisto de la capa superficial, pierde la materia orgánica (humus) y entra en un proceso de deterioro que puede originar hasta un desierto. Erosión eólica:
     El viento es otro de los agentes de la erosión. El suelo desprovisto de la cortina protectora que forman los árboles, es víctima de la acción del viento que pule, talla y arrastra las partículas de suelo y de roca.
     La erosión del suelo también afecta a otros ecosistemas como los ríos, lagos y presas al degradar la calidad del agua, al alterar el hábitat de la flora y fauna que viven ahí. Si los residuos de suelo contienen plaguicidas y fertilizantes contaminan el agua. Cuando se eliminan los bosques para construir una presa hidroeléctrica, la erosión hace que se llene el embalse en un tiempo menor provocando la pérdida de la productividad de electricidad instalada.
     El riego aumenta la productividad agrícola del suelo pero puede causar la salinización (acumulación de sales en el suelo) por las sales que contiene el agua o por las que contiene el suelo en suelos semiáridos y áridos. En condiciones naturales, las precipitaciones pluviales disuelven y arrastran las sales a los ríos y al ser utilizada su agua para riego provoca la acumulación de sales en el suelo.
     Los suelos salinos son menos productivos y llegan a ser inadecuados para la agricultura, ya que provocan el desequilibrio hídrico en las raíces de las plantas, pierden el agua por el fenómeno de la ósmosis. La mayoría de las plantas no pueden sobrevivir en esas condiciones y sólo algunos vegetales que se han adaptado a vivir en suelos salinos pueden tolerar las altas concentraciones de sales y prosperar en dichos suelos. Por ejemplo, el mangle negro excreta el exceso de sal a través de las hojas.
     Actualmente, es probable que mediante la ingeniería genética se puedan cultivar con buena productividad plantas que puedan tolerar altas concentraciones de sales.
Contaminación del suelo
Muchas de las sustancias que contaminan la atmósfera, después de cierto tiempo suspendido en ella, caen por su mayor densidad o son arrastradas por la lluvia, pasando a formar parte de los suelos, los cuales también se contaminan. Sin embargo, esta no es una contaminación tan peligrosa como la producida por los deshechos industriales y la basura.

Contaminación de origen industrial
Todas las industrias producen  desechos nocivos, si estos desechos no son eliminados de manera correcta se transforman en contaminantes. La falta de conciencia conservacionista en las personas ha hecho que suelos, aguas y el mismo hombre sean victimas de la contaminación.
Los contaminantes industriales llegan a través delos conductos de las aguas subterráneas o superficiales o por defectos de los drenajes y son absorbidos por las plantas; los animales herbívoros hacen que estos contaminantes lleguen hasta el hombre por intermedio de las cadenas alimentarías.
 Entre los contaminantes más tóxicos productos de los deshechos industriales se encuentran: el plomo, mercurio, arsénico, selenio... así como los fertilizantes, pesticidas, plaguicidas y raticidas...



Contaminantes sólidos: constituyen lo que llamamos basura y provienen de la actividad cotidiana del hombre, en la industria, comercio, oficina y hogar. El suelo contaminado por basura puede generar proliferación de plagas, insectos y roedores que perjudican la salud de las personas, además de producir olores desagradables. Algunos suelos fértiles se pueden volver pobres para el cultivo de ciertas plantas debido a la acumulación excesiva de sustancias químicas y otros productos de desecho absorbidos por el suelo.

Conservación del suelo
Algunas recomendaciones a tomar en cuenta para evitar el deterioro de los suelos son:
  • Evitar la erosión ocasionada por el agua, el aire o el mismo hombre a través de la tala y la quema
  • Evitar la práctica del monocultivo, que consiste en sembrar siempre en el mismo suelo, el mismo vegetal.
  • Evitar el sobre pastoreo, es conveniente llevar a los animales de un lugar a otro, con la finalidad que el pasto vuelva a crecer.
  • Se recomienda que se construyan terrazas y se siembre en contorno, cuando se siembra sobre terrenos inclinados.
  • Sembrar árboles que sirvan de rompe vientos para que disminuyan el impulso del viento y no destruyan los sembradíos.
  • Evitar la tala y la quema descontrolada por sus efectos para la erosión y la eliminación de microorganismos
  •  Enriquecer el suelo añadiendo abonos que sustituyan los elementos nutritivos que han tomado los vegetales.

El suelo como sistema ecológico
Constituye un conjunto complejo de elementos físicos, químicos y biológicos que compone el sustrato natural en el cual se desarrolla la vida en la superficie de los continentes. El suelo es el hábitat de una biota específica de microorganismos y pequeños animales que constituyen el edafón. El suelo es propio de las tierras emergidas, no existiendo apenas contrapartida equivalente en los ecosistemas acuáticos. Es importante subrayar que el suelo así entendido no se extiende sobre todos los terrenos, sino que en muchos espacios lo que se pisa es roca fresca, o una roca alterada sólo por meteorización, un regolito, que no merece el nombre de suelo.
Desde el punto de vista biológico, las características del suelo más importantes son su permeabilidad, relacionada con la porosidad, su estructura y su composición química. Los suelos retienen las sustancias minerales que las plantas necesitan para su nutrición y que se liberan por la degradación de los restos orgánicos. Un buen suelo es condición para la productividad agrícola.
En el medio natural los suelos más complejos y potentes (gruesos) acompañan a los ecosistemas de mayor biomasa y diversidad, de los que son a la vez producto y condición. En este sentido, desde el punto de vista de la organización jerárquica de los ecosistemas, el suelo es un ecosistema en sí y un subsistema del sistema ecológico del que forma parte.
Suelo orgánico
El estudio de la dinámica del suelo muestra que sigue un proceso evolutivo al que son aplicables por completo los conceptos de la sucesión ecológica. La formación de un suelo profundo y complejo requiere, en condiciones naturales, largos períodos de tiempo y el mínimo de perturbaciones. Donde las circunstancias ambientales son más favorables, el desarrollo de un suelo a partir de un sustrato geológico bruto requiere cientos de años, que pueden ser millares en climas, topografías y litologías menos favorables.
Los procesos que forman el suelo arrancan con la meteorización física y química de la roca bruta. Continúa con el primer establecimiento de una biota, en la que frecuentemente ocupan un lugar prominente los líquenes, y el desarrollo de una primera vegetación. El aporte de materia orgánica pone en marcha la constitución del edafon. El sistema así formado recicla los nutrientes que circulan por la cadena trófica. Los suelos evolucionados, profundos, húmedos y permeables suelen contar con las lombrices de tierra, anélidos oligoguetos comedores de suelo, en su edafón, lo que a su vez favorece una mejor mezcla de las fracciones orgánica y mineral y la fertilidad del suelo.
Causas de la degradación o destrucción de los suelos
  • Meteorización: consiste en la alteración que experimentan las rocas en contacto con el agua, el aire y los seres vivos
Meteorización física o mecánica: es aquella que se produce cuando, al bajar las temperaturas que se encuentran en las grietas de las rocas, se congelan con ella, aumenta su volumen y provoca la fractura de las rocas.
Meteorización química: es aquella que se produce cuando los materiales rocosos reaccionan con el agua o con las sustancias disueltas en ella.
  • Erosión: consiste en el desgaste y fragmentación de los materiales de la superficie terrestre por acción del agua, el viento, etc. Los fragmentos que se desprenden reciben el nombre de detritos.
  • Transporte: consiste en el traslado de los detritos de un lugar a otro.
  • Sedimentación: consiste en el depósito de los materiales transportados, reciben el nombre de sedimentos, y cuando estos sedimentos se cementan originan las rocas sedimentarias.

Los suelos se pueden destruir por las lluvias. Estas van lavando el suelo, quitándole todos los nutrientes que necesita para poder ser fértil, los árboles no pueden crecer ahí y se produce una deforestación que conlleva como consecuencia la desertificación.

El suelo tiene gran importancia porque interviene en el ciclo del agua y los ciclos de los elementos y en él tienen lugar gran parte de las transformaciones de la energía y de la materia de los ecosistemas.

Además, como su regeneración es muy lenta, el suelo debe considerarse como un recurso no renovable y cada vez más escaso, debido a que está sometido a constantes procesos de degradación y destrucción.

La creciente población, asentada en los márgenes de de los ríos, se vio en la necesidad de rellenar o extraer material del las zonas de marisma y llanuras de inundación, es decir zonas que en su estado natural permanecían encharcadas gran parte del año, con el fin de obtener un terreno lo suficientemente estable como para poder seguir desarrollando sus actividades. Es el caso de la mayoría de las principales instalaciones industriales necesitadas de grandes superficies de terreno estable para su asentamiento.
El suelo es en consecuencia, un sistema complejo. Actúa como sistema estático soportando las actividades humanas y como sistema dinámico en el que tienen lugar los procesos biogeoquímicos más cruciales. Esta dualidad obliga a modificar las concepciones tradicionales de suelo que incidían principalmente sobre la utilidad del mismo, tendiendo en la actualidad a enfatizar más sobre las funciones que realiza y la interacción entre ellas.
Yacimientos de materias primas no renovables: El suelo es una fuente de materias primas no renovables; por un lado, de minerales no metálicos de interés primordial para la construcción (piedra, mármol, caliza, yeso, pizarras, arenas) por otro lado, de minerales metálicos (blenda, galena, siderita, pirita) y finalmente de combustibles fósiles como el carbón. La explotación racional y sostenida de los yacimientos ayuda a la protección del recurso suelo.
En el Estado Bolívar la zona minera por excelencia se concentró principalmente en la zona de las Encartaciones. Se trataba de explotaciones a cielo abierto, principalmente de minerales de hierro con destino a la industria siderúrgica.
Actualmente estas explotaciones mineras son instalaciones inactivas pero en su entorno han quedado numerosos restos de la actividad extractiva, pudiendo estos originar importantes procesos de erosión, contaminación hídrica y degradación de la calidad ambiental y de los sistemas bióticos, caso que podemos evidenciar con los garimpeiros frontera con Brasil.
Fuente de materias primas renovables: La mayor parte de la producción de alimento, forraje y otras materias primas renovables está relacionada con el suelo, con el suministro de nutrientes, aire, agua y con su función de soporte.
Destacar que las prácticas actuales de agricultura intensiva y la aplicación excesiva de abonos y fertilizantes, junto con la erosión y la compactación, son las principales amenazas a una agricultura sostenible ambientalmente.
Emplazamiento de viviendas e infraestructuras: El suelo es también un medio físico para el desarrollo de infraestructuras, viviendas, edificios industriales, carreteras, áreas de recreo, áreas de deposición de residuos. Las características físicas, químicas y mecánicas del suelo condicionan en gran medida la viabilidad técnica y económica de estas infraestructuras.
Durante siglos, todas las funciones del suelo eran mantenidas sin gran problema. Las dificultades surgieron a comienzos de este siglo, cuando el desarrollo creciente comenzó a entrar en conflicto con las funciones naturales del suelo. El aumento de asentamientos humanos y de infraestructuras, principalmente para las industrias y el transporte, el vertido de residuos, la extracción de minerales y la agricultura intensiva, entre otros, han ejercido y siguen ejerciendo una gran presión sobre el sistema suelo.
Algunas de estas alteraciones han sido positivas y han conducido a una mejora de ciertas funciones del suelo. Sin embargo, lo más habitual es que las actividades humanas provoquen un deterioro de las características de este medio, lo cual suele conducir a la degradación de una o más de sus funciones. Para establecer una política adecuada de usos del suelo, el punto de partida lógico es la evaluación de la sostenibilidad y vulnerabilidad en su sentido más amplio. El principal objetivo ha de ser mantener el equilibrio adecuado que permita que sus funciones se desarrollen con normalidad. Se define la degradación del suelo como el proceso degenerativo que reduce la capacidad actual o futura de los suelos para seguir desempeñando sus funciones características. Esto puede obedecer tanto a causas naturales como a causas antrópicos.

Geosinclinal

El término geosinclinal ha sido usado principalmente para un concepto geológico ahora obsoleto que intentaba explicar el movimiento vertical de la corteza terrestre y otras observaciones geológicas. Este concepto fue superado al aceptarse la teoría de tectónica de placas.
Un geosinclinal es un sinclinal largo y profundo en forma de fosa submarina, que se llena de sedimentos; éstos, al acercarse mutuamente los bordes de la cubeta, son expulsados de la misma, se elevan y forman una cordillera. El sinclinal, aunque muy largo, es inicialmente poco profundo, pero su fondo se va hundiendo progresivamente bajo el peso de los sedimentos que en él se depositan (materiales calcáreos, arcillas, margas) hasta formar un flysch. Luego obran fuerzas tectónicas que en direcciones opuestas acercan dos taludes de la fosa, lo que contribuye también a aumentar su profundidad y, por consiguiente, el espesor del depósito sedimentario que sigue llenándola.
En las capas más profundas de la fosa, los sedimentos se transforman en rocas metamórficas. Bajo los efectos conjugados de la presión, la temperatura, las fumarolas y otras manifestaciones del magmatismo, los sedimentos arcillosos se convierten en gneis y en micasquistos, mientras que los sedimentos calcáreos se transforman en mármol.


Como los dos taludes del geosinclinal siguen aproximándose, el volumen por ellas limitado va reduciéndose. Así, pues, su contenido sedimentario se pliega, emerge y desborda por ambos lados, fenómeno correspondiente a la subrepción de una nueva cordillera. De este modo el geosinclinal alpino, depresión antes limitada por el Macizo Central francés y el Piamonte italiano, ha dado lugar a la formación de los Alpes.








CONCLUSION
     Los suelos en Venezuela son para uso agrícola vegetal; sin embargo el mal drenaje y las altas precipitaciones han dado lugar a la actividad pecuaria, nuestros suelos en un gran porcentaje son suelos húmedos.
En las zonas noreste se encuentran ciénagas con suelos arcillosos, condiciones permanentes de mal drenaje y erosión hídrica, mientras que hacia el centro encontramos el área de influencia de los ríos Chama y Onia que son los que presentan mejores condiciones de todo el sur del Lago. Son de textura media, que han sido originados por el gran deposicional causado por los ríos; también encontramos el área de influencia del río Escalante que presenta un patrón de suelo más complejo, con alta proporción de arcilla, con fuertes a severos problemas de drenaje y sometidos a frecuentes inundaciones (Ultima Inundación Registrada 1972). Por último hacia la parte sur encontramos el explayamiento del piedemonte andino, constituidos por suelos de textura media, bastante permeables, de alta pedregosidad. Esta es la zona más explotada de la región principalmente para la actividad de ganadería lechera y cultivos de plátano, este conjunto de conocimiento hace posible el aprovechamiento de los recursos naturales renovables y no renovables con los que cuenta el profesional que cursa esta cátedra y así obtener el mejor provecho aplicando las normas básicas de todo administrador que nos es mas que: planificar, dirigir, controlar y organizar eficientemente el entorno…












BIBLIOGRÁFICAS
ARIAS, L. 1980. Diagnóstico de sistemas de producción. Herramienta de planificación de la investigación en la Estación Experimental del Norte-Oriente de Guárico. FONAIAP Valle de la Pascua. Estado Guárico. p. 36.
CASANOVA, E., PÁEZ. M. y RODRÍGUEZ, O. 1989. Pérdida de nutrimentos por erosión bajo diferentes manejos en dos suelos agrícolas. Revista de la Facultad de Agronomía de la UCV. Alcance 37:33-43.
FAO, 1967. La erosión del suelo por el agua. Cuadernos de fomento agropecuario. Nº 81 Roma. 207 p.
FUSAGRI, 1987. Noticias Agrícolas, Fundación Servicio para el Agricultor, Vol. XI:15.
LAL, R. 1975. Soil erosion problems on an Alfisol in Western Nigeria and their control. IITA. Monograph Nº 1. 160 p.
SÁNCHEZ, R. 1984. Evaluación de herbicidas y procesos del suelo (Sorghum bicolor (L) Moech) bajo sistemas de la- branza: Convencional y Mínima en Chaguaramas (Estado Guárico). Tesis MSc, Facultad de Agronomía, Universidad Central de Venezuela. Maracay, Venezuela. 153 p









martes, 17 de mayo de 2011

Venezuela un pais Sismico









¿Venezuela es un País Sísmico?
     Los eventos sísmicos representan uno de los mayores riesgos potenciales en Venezuela en cuanto a pérdidas humanas y económicas. En la actualidad, aproximadamente un 80% de la población vive en zonas de alta amenaza sísmica, variable que aumenta el nivel de riesgo, haciéndolo cada vez mayor a medida que se eleva el índice demográfico y las inversiones en infraestructura.

     Desde la fundación de los primeros asentamientos coloniales en el Siglo XVI, el país ha sufrido los efectos de los terremotos. Su historia sísmica revela que durante el período 1530-2004, han ocurrido más de 130 eventos sísmicos, los cuales han provocado algún tipo de daño en varias poblaciones venezolanas.

     En Venezuela, la zona de mayor actividad sísmica corresponde a una franja de unos 100 km de ancho, definida a lo largo de los sistemas montañosos de Los Andes, la Cordillera Central y la Cordillera Oriental, lugares en los que se ubican los principales sistemas de fallas sismogénicas del país: Boconó, San Sebastián y El Pilar, respectivamente.

     Además de este sistema de accidentes tectónicos, existen otros sistemas activos menores (por ejemplo: Oca-Ancón, Valera, La Victoria y Urica) capaces de producir sismos importantes.
     Los sistemas de fallas de Boconó - San Sebastián - El Pilar, han sido propuestos como el límite principal entre las Placas Caribe y América del Sur, causante de los sismos más severos que han ocurrido en el territorio nacional.


     Las zonas de mayor riesgo están principalmente en la zona costera y los andes Venezolanos.

     En la costa es oeste a este: Maracaibo (falla de Oca); Sur de Coro (Falla de Ancón) estas dos forman un sistema llamado Oca-Ancon.
     Desde la depresión del Táchira hasta Morón, la Falla de Boconó, que atraviesa todos los Andes e incluye en sus zonas de riesgo a: S. Cristóbal, Mérida, Trujillo, y de allí hasta golfo triste (frente a Morón).
     Desde allá esa falla se une al Sistema Caribe representado por el sistema de Fallas de San Sebastián-Cariaco y sigue hasta Trinidad, todas las ciudades cercanas a la costa, incluyendo Valencia, Maracay, Caracas, Higuerote, Barcelona, Pto. La Cruz, Cumaná, Cariaco....etc.
     Esas son las principales, además los terrenos estructurales de Zulia-Falcón-Lara son altamente sísmicos, ya que se encuentran en posición subductante sobre la placa Caribe.


jueves, 5 de mayo de 2011

Instituto Centro Futuro

                                                      


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